jueves, diciembre 25, 2008

¡La tengo!

Es pequeña, esponjosa, levaduriforme y tiene cinco cicatrices de gemación, además de unos ojillos hermosos a medio cerrar, como si ya tuviera un buen rato en el fermentador, pero lo más importante, es mía: ¡mi peluche de la levadura de la chela!

Saccharomyces cerevisae (Sachie) en peluche, ¿a poco no está hermosa?

Me obsesioné con ella desde la primera vez que la ví en la red, y hoy gracias a Sámano es toda mía: ¡Mil Gracias! Snif. Fue también un buen pretexto para pasar un rato ameno en el centro de Morelia, junto con Sámano, Violeta y un chico danés cuyo nombre no recuerdo y que posee un vocho verde decorado con globos oculares en llamas (UPDATE: Él se llama Simon Jansfort, gracias Violeta). Sámano tiene la foto. (UPDATE: Se puede observar en la foto que el vocho no era verde, sino rojo, y las llamas de los globos oculares sí son verdes. Eso lo hace todavía más excéntrico)
Sachie, paseando por la plaza Benito Juárez donde platicaba Sámano con un joven artista que exponía ahí sus cuadros, los únicos cuadros de arte de ese que yo no entiendo, que sí me gustaron. No tengo fotos :(

Desayunamos en un restaurant del centro con una decoración muy interesante, pero un café malón. Los chilaquiles que pedimos venían acompañados con frijoles refritos y unos totopos con hoyitos que los hacían parecer antifaces.

Bueno, a Violeta le pareció más una nariz de puerquito.

A Sachie le quedaban perfectos... ternurita.

Terminando el desayuno despedimos a Violeta y al chico danés, y Sámano, que está encantado con el dirty chai, sugirió que fuéramos al Café Europa de los portales a ver si nos podían servir uno. No pensé que nos lo fueran a servir, pues tal cosa no existe en su carta, pero sorpresivamente accedieron a prepararlo. Lo tomé con reservas, pero la verdad es que me gustó mucho. Ahora cuando vaya a un café, y siempre que se pueda, pediré que me den un té chai con leche y un shot de expreso. Rico.

Sachie contemplando el chai sucio. No lo sirven con la figura de la hoja en la espuma pero, qué mas da.

Y hablando de lugares para ir a comer, hace unas semanas fuimos con mis padres y uno de mis hermanos a un restaurant camino a Pátzcuaro (pasando las desviaciones a Cuanajo y Turicato). Se llama La Cabaña Alegre, es un restaurant campestre muy agradable, de muy buena comida, donde los meseros están disfrazados y la carta misma es toda una botana. Tardé mucho en pedir mi plato porque estaba botada de la risa con la carta. Tanto así que el dueño del restaurant me regaló una. Genial. Lo recomiendo ampliamente. Los domingos hay mariachi a medio día.

Un vistazo a la carta. La comida es muy buena y el paisaje es hermoso (bosque mixto). Si pueden, vayan.

1 comentarios:

Mario Samano dijo...

sí, a sachie le quedan super bien los lentes. le dan un aire intelectual.

sube fotos al fb.

 
Copyright 2009 Soy yo, Nepita.. Powered by Blogger Blogger Templates create by Deluxe Templates. WP by Masterplan