martes, septiembre 04, 2007

En las nubes...

Ya he dicho que no me gusta el cielo azul, porque es sinónimo de sol intenso y calor agobiante. Pero esa no es la única razón por la que no me gusta el cielo azul.


Se que sonará extraño, pero, ¿para qué es este espacio sino para vaciar las ideas mas retorcidas que se generen en mi revuelta mente? Así que explicare mis motivos. El cielo azul no tiene obstáculos visibles entre al tierra el espacio, como no sea la inmensa capa de gases que es la atmósfera; luego entonces, es la imagen más clara del infinito. No hay nada visible entre mi mortal y terrestre ser y el resto del universo. Es como estar en una casa a la que una tormenta le ha arrancado el techo. Me siento entonces descobijada, destapada, vulnerable, además de infinitamente pequeña: El cielo azul es una vista directa la infinidad del cosmos, no hay límite. El cielo nocturno puede brindar la ilusión de un manto gracias a los objetos celestes que aparentan estar todos a una misma distancia (por algo nuestros antepasados idearon el plano celeste). Pero en el cielo azul no hay nada, ni una sola referencia. Es un abismo.


En cambio el cielo lleno de nubes, además de traer consigo más bajas temperaturas, sombras y frescas brisas (en la mayoría de los casos), también tiene la bondad de ser un límite más cercano a la tierra. Es casi tocable, con un poco de imaginación (o de dinero, para comprar un boleto de avión). Cuando el cielo se encuentra perfectamente cubierto de nubes, mi casa está completa e íntegra, estoy a salvo del exterior, y mi ser no tiene que ser comparado con la enormidad del todo.


Si todo el año estuviera por lo menos parcialmente nublado, ya sea con las nubes blancas de medio día, las grises de tormenta o media tarde, o las coloridas nubes del amanecer y del crepúsculo, con cúmulos, cirros o nimbostratos, si todo el año estuviera por los menos parcialmente nublado, decía, yo no tendría queja alguna. Pero el mundo necesita de la luz del sol, aunque a mí me salgan ronchas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

A mi no me gustan los amaneceres, cuando los veo significa que no he dormido

Aura dijo...

JAJAJA!!! Claro, o que te has tenido que levantar demasiado temprano... bueno a mí si me gustan los amaneceres, pero lo jque implican no es muy agradable. En eso estamos de acuerdo.

 
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